La última tarde del verano mientras fumaba en la acera con una amiga fuera del trabajo, me contó una pequeña anécdota y esta se volvió tan familiar cuando dijo "osea no somos nada pero él no se" y como un flashback recordé aquello que yo permití y pude ver en sus ojos la ansiedad y el dolor que ese chico le causaba, me vi reflejada en ella y como si me abrazará a mí misma, la abrace fuerte, la deje desahogarse unos minutos y luego le dije aquello que me hubiera gustado que me digan a mí, que era una mujer sabia porque en verdad lo creía, que era una mujer bonita, porque lo es realmente pero sobretodo que es valiosa, a lo que ella me respondió "no entiendo porque no soy suficiente", las lagrimas querían desbordarse por mis mejillas pero no lo permití, porque entendí que eso no le serviría de nada a ella y que si Dios, el universo o como sea que se maneje el destino me habían hecho padecer todo lo que pase, era con un fin, así que le dije aquello que una noche me sir...
Pensamientos sobre la vida, el desamor, la confianza y el amor propio.